Hay muchas razones por las cuales su reclamo de beneficios puede haber sido denegado:
- No cumple con los requisitos básicos no médicos (gana demasiado dinero, tiene créditos de trabajo insuficientes);
- No cumple con los requisitos médicos (su condición no durará lo suficiente o no es lo suficientemente grave);
- Usted se niega a seguir el tratamiento o terapia prescritos por su médico;
- No coopera con el SSA (se niega a divulgar registros médicos, no asiste al examen consultivo requerido, etc.);
- El SSA no puede ponerse en contacto con usted;
- Su incapacidad se debe a abuso de drogas o alcohol;
- No hay suficiente evidencia médica (falta de documentación completa o el testimonio de un médico);
- Usted ha sido condenado por un delito (no puede recibir beneficios mientras está en prisión o si se lesionó mientras estuvo encarcelado); o
- Esta cometiendo fraude.
Junto con estos 9 contribuidores se une el hecho básico de que si su aplicación no está bien desarrollada, corre un mayor riesgo de rechazo. Este problema en particular se puede aliviar con la ayuda de un abogado.